Medellín, 30 de noviembre de 2025.

• La BI_AM 2025 movilizó a más de 450 mil personas en 15 municipios de las nueve subregiones de Antioquia.

• Durante ocho semanas, se ofrecieron más de 134 actividades gratuitas de artistas como Ibrahim Mahama y Azuma Makoto, que redefinieron el panorama cultural regional.

• Tras 44 años, la Bienal regresó para posicionar a Antioquia como un referente global de libertad creativa. En 2027 se realizará una nueva edición de la Bienal. 

La Bienal Internacional de Arte de Antioquia y Medellín; BI_AM, concluyó su edición 2025, luego de 44 años sin realizarse, y dejó un balance positivo con más de 450 mil asistentes, la participación de 15 municipios de las nueve subregiones, más de 100 artistas, colectivos y comunidades y dejó un escenario dinámico para el arte contemporáneo en el departamento. 

"Esta edición logró conectar más de 100 artistas con millas de visitantes en todo el territorio antioqueño. Los indicadores de asistencia, producción artística y apropiación ciudadana superaron las expectativas, consolidando un modelo de bienal descentralizada que integra lo local con lo global y fortalece nuestro tejido cultural", indicó el director del Instituto de Cultura y Patrimonio de Antioquia, ICPA, Roberto Rave, al anunciar que la Bienal se seguirá realizando y la siguiente será en el año 2027. 

Durante ocho semanas, la BI_AM desarrolló una programación gratuita con más de 134 actividades, que incluyeron talleres, performances, conciertos, experiencias inmersivas, instalaciones, encuentros con artistas y laboratorios de creación. Todo ello bajo el eje curatorial "El arte, una ventana a la libertad" que conecta comunidades urbanas y rurales.  

La producción artística facilitó la creación de obras y procesos creativos de artistas municipales, nacionales e internacionales. Entre las piezas que captaron la atención figuraron las intervenciones de los artistas Ibrahim Mahama, las instalaciones florales de Azuma Makoto, la propuesta de Betsabeé Romero y las obras de Mauricio Cárdenas Rivera. Las exposiciones y experiencias se distribuyeron en espacios emblemáticos como el Museo de Antioquia, el Pabellón Antioquia en el antiguo Edificio de Coltabaco, el Pabellón Bello (Parque de Artes y Oficios), el Palacio de la Cultura Rafael Uribe Uribe y el Distrito Creativo del Perpetuo Socorro; además de casas de la cultura, plazas y bibliotecas en diversas subregiones. 

En municipios como Andes, Jericó, Caucasia y Apartadó se reafirmó el propósito de brindar acceso a la cultura, integrando a comunidades, gestores y colectivos locales mediante proyectos de autogestión artística. Asimismo, las actuaciones del colectivo El Cuerpo Habla y la itinerancia del "Pájaro Café" de Carlos Castro, en La Ceja, llevaron el arte directamente a las comunidades. También, el BiAM Fest, en las instalaciones de Coltabaco, se convirtió en un punto central de arte en vivo, con presentaciones culturales, intervenciones y un concurrido evento de clausura. 

El impacto de la BI_AM 2025 también se reflejó en la inversión de 4 mil millones de pesos, 3 mil millones de los cuales fueron aportados por los aliados, que contribuyó a la dinamización del turismo cultural y el fortalecimiento del ecosistema creativo regional. De acuerdo con el director del ICPA, esta edición se consolida a nivel país y deja un nuevo referente para el arte en Colombia, donde la creación, la memoria y la libertad encuentran un espacio de diálogo con la gente y el territorio. 

"La ciudad necesita tener este tipo de espacios donde se promueva el arte y, sobre todo, estas manifestaciones artísticas tan interesantes, tan abiertas no solo de ciudad sino de país y el mundo", fueron algunos de los comentarios de nueve millones de usuarios impactados a través de las redes sociales. 

La Bienal fue posible gracias a una articulación interinstitucional, liderada por el Instituto de Cultura y Patrimonio de Antioquia -ICPA, con el respaldo de la Gobernación de Antioquia y el Distrito de Medellín. A ellos se sumaron 58 aliados estratégicos como la Cámara de Comercio de Medellín para Antioquia, el Metro de Medellín, la Alcaldía de Bello, Proantioquia y Rappi, entre muchos otros, que hicieron posible la descentralización del arte en el departamento.